sábado, 16 de enero de 2016

El "problema" de España XIII

      Supone un salto en el tiempo respecto a la entrega anterior, pero creo interesante el final con el que acaba Juan Pablo Fusi su Historia mínima de España, libro sobre el que ya hablamos en su momento y que de nuevo no puedo sino volver a recomendar. Por su claridad evito cualquier comentario, independientemente del acuerdo o no que pueda suscitar. Por otra parte el razonamiento viene bien en estos momentos de incertidumbre y en cualquier caso, es un acicate para conocer mejor nuestra propia historia. Ahí va:

          “La historia futura de esa España refundada democráticamente desde 1975 será, por definición, imprevisible, a menudo inquietante y siempre problemática: en ningún sitio está escrito que la historia sea o racional o justa. España, muchas historias posibles, era –si se recuerda lo escrito al principio- la tesis de este libro. España, en efecto, pudo haber quedado de forma permanente, como Turquía, dentro del mundo islámico, o pudo haber cristalizado, como Italia hasta 1861, en una pluralidad de reinos y estados, tal como se constituyó en los siglos XIII a XV. España se asomó a la historia europea con los Reyes Católicos. Fue un imperio universal y la gran potencia hegemónica en los siglos XVI y XVII. Fue, luego, un estado fallido en el siglo XIX y un país en buena medida trágico (Guerra Civil, dictadura de Franco), en el XX.

          "La historia de España no es –quede claro- ni una historia única ni una historia excepcional. Como la historia de cualquier otro país, la historia de España es, sencillamente, una historia muy interesante, cuyo conocimiento –una obligación política y moral para hablar apropiadamente de España- plantea un amplio repertorio de cuestiones esenciales. La verdad histórica, escribió Ranke, al fin y al cabo el más interesante historiador de los tiempos modernos, es “infinitamente más hermosa y infinitamente más interesante que la ficción novelesca”.